We have been re-accredited by JCI
Tras la minuciosa evaluación de una serie de parámetros que demuestran el cumplimiento de estándares internacionales de cara a la prestación de servicios médicos, la Joint Commission International −JCI−, ha acreditado por cuarta vez al Instituto Cardiovascular de la FCV, con el sello de calidad y seguridad en la atención al paciente. Cabe resaltar que el centro hospitalario se convirtió en 2009, en el primero en Colombia que obtuvo este reconocimiento; después de 10 años, la clínica sigue manteniendo el “estándar de oro” en la atención de salud global. Hoy, el Hospital Internacional de Colombia se une a este logro, recibiendo la acreditación por primera vez.
El Instituto Cardiovascular de la FCV ha obtenido por cuarta vez el reconocimiento “Gold Seal of Approval” en calidad y seguridad de los pacientes. Esta distinción ha sido otorgada recientemente por la JCI, líder internacional en la acreditación de atención médica. El Hospital Internacional de Colombia, por su parte, ha logrado esta acreditación que otorga el organismo, por primera vez.
Bucaramanga, 18 de marzo de 2019. Tras la minuciosa evaluación de una serie de parámetros que demuestran el cumplimiento de estándares internacionales de cara a la prestación de servicios médicos, la Joint Commission International −JCI−, ha acreditado por cuarta vez al Instituto Cardiovascular de la FCV, con el sello de calidad y seguridad en la atención al paciente. Cabe resaltar que el centro hospitalario se convirtió en 2009, en el primero en Colombia que obtuvo este reconocimiento; después de 10 años, la clínica sigue manteniendo el “estándar de oro” en la atención de salud global. Hoy, el Hospital Internacional de Colombia se une a este logro, recibiendo la acreditación por primera vez.
Para el doctor Víctor Raúl Castillo Mantilla, presidente de ambos centros hospitalarios, “renovar la acreditación de la JCI es muy importante para la institución porque es la evidencia de que nuestros usuarios son atendidos de la mejor forma; para el HIC, obtener por primera vez este reconocimiento luego de casi tres años de estar en funcionamiento, es un logro gigantesco, que sitúa al paciente como el eje central de nuestros procesos”.
Es importante mencionar que la JCI tiene la finalidad de mejorar la calidad de la atención en la comunidad internacional, facilitando servicios de acreditación en todo el mundo. El ente identifica, mide y comparte las mejores prácticas de calidad y seguridad del paciente; además, ayuda a las organizaciones de atención médica en todos los entornos, a mejorar su desempeño y resultados. “El hecho de que una entidad como la JCI, con más de 50 años de experiencia a nivel mundial acredite a nuestros hospitales, es motivo de orgullo, ya que nos permite constatar que además de calidad, cumplimos con los más exigentes estándares de seguridad en la atención del paciente a lo largo del proceso asistencial”, señala Sonia Ramírez Ribero, vicepresidente corporativo de la FCV.
De acuerdo con la directiva, se han intervenido y mejorado, a la luz de las altas exigencias de la JCI, aspectos de infraestructura; de comunicación e información al paciente y su familia; protocolos en la atención; las competencias, formación y evaluación del personal de salud y administrativo, entre otros. “En este proceso de acreditación intervienen integralmente todas las áreas de la institución para que lo que impacte en la atención segura del paciente, esté funcionando debidamente”, asegura la vicepresidente.
Cabe subrayar que en Colombia, únicamente cinco hospitales están acreditados por la JCI (el Centro Médico Imbanaco, ubicado en Cali; la Fundación Cardioinfantil, de Bogotá; el Hospital Pablo Tobón Uribe, situado en Medellín; el Hospital Universitario Fundación Santa Fé de Bogotá; el Instituto Cardiovascular y el Hospital Internacional de Colombia, ambos de la FCV, localizados en el área metropolitana de Bucaramanga). De acuerdo con el documento “Mejorar la atención. Empoderar el cambio”, publicado por el ente evaluador: “La acreditación de JCI refleja verdaderamente la dinámica del cuidado de la salud en la actualidad. Desafíos emergentes con respecto a infecciones relacionadas con el cuidado de la salud, la seguridad de los medicamentos y la tecnología, generaron un mayor escrutinio y estándares más rigurosos. Las organizaciones dependen de JCI para definir (…) los parámetros mundiales para el mejoramiento, y obtener las herramientas que les ayudarán a lograr la calidad” −Paul Chang, MD, MBA, MPH, CPHQ, FACHE Vicepresidente, Acreditación, Estándares y Medición Joint Commission International, https://www.jointcommissioninternational.org−.
Una acreditación a favor de las buenas prácticas
Laura Ordoñez Vides, jefe de Planeación y Calidad de la FCV, apunta que “la acreditación orienta todas las fases de la gestión hacia la eficiencia y las mejores prácticas, desde la claridad de las responsabilidades de los líderes hasta los procesos críticos de la gestión de la organización o de la planificación estratégica”. Asimismo, la JCI destaca en sus medios que la relación entre el ente y los centros médicos no se detiene con la acreditación inicial, pues continúa trabajando con estas organizaciones de alto rendimiento para ayudarles a mantenerse al día con los nuevos estándares, y ofrecer orientación sobre la expectativa continua de mejora del rendimiento que promueve.
Desde la perspectiva del doctor Castillo Mantilla, la acreditación de hoy, es mucho más exigente que la de los años anteriores. Teniendo en cuenta que la JCI tiene más de mil elementos medibles, “cumplir con cada uno de ellos en su totalidad, y en los dos centros hospitalarios, es aún más meritorio”. Vale la pena mencionar que las clínicas de la FCV, además de tener este “Gold Seal of Approval” en calidad y seguridad de los pacientes, se encuentran en el top tres de las mejores clínicas y hospitales colombianos, y están entre las 10 mejores instituciones médicas de América Latina, según el ranking que realiza la Revista América Economía.
“La mejor evidencia de esos estándares de seguridad en la atención, en los que estamos acreditados, está dada por los resultados médicos. Hay muchas actividades y procesos en pro de la seguridad del paciente que pasan desapercibidos por él y su familia. El cumplimiento de parámetros tan exigentes implica un gran esfuerzo de todo el equipo humano de los centros hospitalarios. Una atención segura es nuestro valor agregado”, concluye la doctora Sonia Ramírez.